Si tu útero está IRRITADO por algo será

No hay nada malo en tu útero.
Ni está confundido.
Si tu útero está irritado, dolorido, desvitalizado, enfermo…. Por algo será.
No es porque sea así tampoco, ni porque esté en tu contra.
Es porque algo le pasa, algo está expresando que necesita que escuches para que le (te) puedas ayudar a liberarse y sanar.
M. te va a contar su propia experiencia….
“Llevo casi un año haciendo terapia con Esther, seguía su trabajo desde hace un tiempo y tras el parto de mi segundo hijo sentí que ella era la persona que podía ayudarme por su labor en la etapa perinatal y en el acompañamiento a mujeres.
Lo que no sabía es cuan profunda iba a ser este proceso de sanación.
Gracias a la hipnosis y al acompañamiento cálido y presente de Esther estoy pudiendo recomponerme de mis experiencias traumáticas de partos prematuros y partos con violencia.
Los médicos solo me daban esta respuesta a lo que me pasaba en los embarazos: IRRITABILIDAD UTERINA, sin causa concreta mi útero se ponía de contracciones.
He trabajado esto con Esther y gracias a la hipnosis se ha destapado el verdadero origen de mi problema y de otras muchas cosas que me estructuran y me atraviesan: sufrí abuso sexual en la infancia y esta experiencia a nivel inconsciente me ha condicionado durante más de 30 años.
En las sesiones han aparecido imágenes y recuerdos que estaban escondidos en lo más profundo de mí.
Ahora estoy recomponiéndome, he podido sentir mi útero, conectarme con él y empezar a liberar el dolor. Por supuesto me ha ayudado a priorizarme a mí y a mis hijos, a conectarme a ellos y a maternarme a mí y a mi niña interior.
Una fuerza interior se ha despertado en mi y ahora me siento una mujer capaz de crear, de gestar y de sostener la vida.
Estoy profundamente agradecida a Esther, por su saber hacer impecable y su acompañamiento amoroso y respetuoso en esta situación tan delicada. Millones de gracias. M.”
Ahora creo que podrás comprender algo más. Esta maravillosa sanación es solo un ejemplo.
Nuestros úteros están cargados de memorias. Pero podemos liberarlas. Por suerte hoy en día tenemos el conocimiento y los recursos para ello. Estoy encantadísima de acompañarte.
Con Amor,
Esther